Despido por faltar al trabajo sin justificar
¿Qué se considera una falta injustificada en el trabajo?
Las faltas injustificadas ocurren cuando un colaborador no puede demostrar una causa válida para ausentarse de sus labores. Esto sucede, por ejemplo, al faltar sin notificar previamente, no solicitar un permiso de ausencia o no presentar justificantes que respalden su inasistencia. Estas acciones pueden violar las políticas internas y afectar la dinámica laboral.
Ejemplos de faltas injustificadas:
Ausentarse sin previo aviso ni justificación médica o legal.
Faltar tras negarse un permiso de ausencia.
No acudir al trabajo alegando motivos personales sin comunicarlo formalmente.
Reincidir en llegadas tarde hasta que se considere abandono parcial de las labores.
¿Qué establece la Ley Federal del Trabajo sobre las faltas injustificadas?
La Ley Federal del Trabajo (LFT) estipula en su artículo 47 que un colaborador puede ser despedido sin responsabilidad para el empleador si acumula más de tres faltas injustificadas en un período de 30 días, siempre que estas no cuenten con permiso o una causa válida.
Además, el artículo 134 señala que es obligación del colaborador cumplir con su jornada en el tiempo y lugar acordados, notificando de inmediato cualquier ausencia justificada. Por su parte, el artículo 135 prohíbe faltar al trabajo sin autorización o motivo legítimo, reforzando la importancia de la asistencia como parte del compromiso laboral.
Consecuencias legales del despido por faltas injustificadas
El despido por faltas injustificadas, si no se maneja adecuadamente, puede derivar en conflictos legales entre empleadores y colaboradores. La Ley Federal del Trabajo permite la rescisión de contrato sin responsabilidad para el patrón cuando el empleado acumula más de tres inasistencias injustificadas en 30 días, siempre que se cumplan ciertos requisitos legales.
Posibles consecuencias para el empleador:
Posible demanda por despido injustificado: Si no se documentan correctamente las faltas o no se entrega el aviso por escrito, el trabajador podría reclamar ante las autoridades laborales.
Pago de indemnizaciones: Si el despido no cumple con lo estipulado por la ley, la empresa puede enfrentar el pago de liquidaciones o salarios caídos.
Sanciones administrativas: Procedimientos incorrectos podrían derivar en inspecciones laborales y multas por parte de las autoridades competentes.
Posibles consecuencias para el colaborador:
Pérdida de derechos laborales: Al tratarse de un despido justificado, el empleado pierde el derecho a una indemnización o liquidación.
Impacto en el historial laboral: Las faltas injustificadas y el despido correspondiente pueden influir negativamente en futuras referencias laborales.
Acceso limitado a beneficios: En algunos casos, el trabajador podría enfrentar dificultades para acceder a prestaciones como el seguro de desempleo.
Cómo evitar el despido por faltas injustificadas
Prevenir situaciones de despido por faltas injustificadas no solo protege el bienestar de tu equipo, sino que también fortalece la relación laboral y reduce conflictos innecesarios. Aquí tienes algunas prácticas clave para abordar este tema con empatía y profesionalismo:
Establece reglas claras desde el inicio
Fomenta la comunicación abierta
Ofrece flexibilidad razonable
Documenta y retroalimenta
Escucha antes de actuar
